LA DEVOCIÓN DE LOS PAPAS, OBISPOS, SACERDOTES, MONARCAS y VIRREYES A NUESTRA SEÑORA DE LUJÁN

   Ya en 1761 se tributa culto público y solemne a la Purísima e Inmaculada Concepción bajo la advocación de Nuestra Señora de Luján. El Sr. Obispo de Buenos Aires, Fr. Cristóbal de la Mancha y Velasco celebró a sus pies misa de Pontifical. En aquellas épocas, todos los obispos de Buenos Aires demuestran tener como principal honra el poner bajo la protección de la milagrosa imagen a su diócesis. Y no sólo ellos, sino también los obispos del Paraguay, de Santa Cruz de la Sierra del Alto Perú, de Córdoba, de Arequipa, de Guadamanga, el obispo de Montevideo, el Arzobispo de Chile, innumerables prelados y clérigos y los Dele gados Apostólicos representantes de la Santa Sede en esos tiempos de cristiana e hispánica Fe en las tierras del Plata.
   Los Sumos Pontífices Clemente XI, Clemente XIV, Pío VI, Pío IX y León X han dado numerosos Documentos con el fin de desarrollar en los fieles la devoción a Nuestra Señora de Luján. En este santuario se albergó en 1824 el futuro Papa Pío IX. Es también el Cardenal Pacelli, luego Pío XII, quien se postra reverente a Sus plantas, siendo legado papal en Buenos Aires con motivo del XXXII Congreso Eucarístico Internacional, "la más grande manifestación de Fe de todos los tiempos", según sus propias palabras. Estos dos Pontífices proclamaron los dos últimos dogmas marianos: la Inmaculada Concepción y la Asunción de María Santísima en cuerpo y alma a los Cielos.
   A los pies de la Sacrosanta Virgen de Luján han pasado en número incontable los gobernadores de casi todas las provincias del Virreinato del Río de la Plata; innumerables virreyes entre los que se cuentan el Virrey Ceballos, Vértiz, Arredondo, Avilés y Del Pino; y también ha manifestado su amor por esta advocación el rey de la cristianísima España Fernando VI.
   Todo lo cual demuestra que lo más respetable y católico de la sociedad ha tenido siempre por gran honra venerar a Nuestra Santísima Señora de Luján.



*Sacado de la Revista "Regina Angelorum", del mes de agosto de 1978.

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