MISA DEL DOMINGO DE SEPTUAGÉSIMA

DOMINGO DE SEPTUAGÉSIMA

Estación en San Lorenzo extramuros
(Semidoble de 2ª clase  - Ornamentos morados)

INTROITUS Ps. 17, 5, 6 et 7 -  Círcumdedérunt me gémitus mortis, dolóres inférni circumdedérunt me: et in tribulatióne mea invocávi Dóminum, et exaudívit de templo sancto suo vocem meam. V. ibid., 2-3 Díligam te, Dómine, fortitúdo mea: Dóminus firmaméntum meum, et refúgium meum, et liberátor meus. V. Glória Patri.
   Introito - Cercáronme angustias de muerte; dolores de infierno me rodearon: y en mi tribulación invoqué al señor, y Él oyó mi voz desde su santo templo. - Ps. Te amaré Señor, fortaleza mía: el Señor es mi fortaleza y mi refugio, y mi libertador. V. Gloria al Padre.
 No se dice Gloria in excelsis. 
Oración-Colecta
 ORATIOPreces pópuli tui, quæsumus, Dómine, cleménter exáudi: ut, qui juste pro peccátis nostris afflígimur, pro tui nóminis glória misericórditer liberémur. Per Dóminum.   Te rogamos, Señor, escuches benignamente las oraciones de tu pueblo, haciendo que los que nos sentimos justamente atormentados a consecuencia de nuestros pecados, seamos salvos misericordiosamente para honra de tu nombre. Por Jesucristo Nuestro Señor. 
Léctio Epístolæ beáti Pauli Apóstoli ad Corinthios. I Cor. 9, 24-27 et 10, 1-5 
   Fratres: Nescítis quod ii qui in stádio currunt, omnes quidem currunt, sed unus áccipit bravíum? Sic cúrrite, ut comprehendátis. Omnis autem qui in agóne conténdit, ab ómnibus se ábstinet: et illi quidem ut corruptíbilem corónam accípiant; nos autem incorrúptam. Ego ígitur sic curro, non quasi in incértum: sic pugno, non quasi áërem vérberans: sed castígo corpus meum, et in servitútem rédigo: ne forte cum áliis prædicáverim, ipse réprobus effíciar. Nolo enim vos ignoráre, fratres, quóniam patres nostri omnes sub nube fuérunt, et omnes mare transiérunt, et omnes in Móyse baptizáti sunt in nube, et in mari: et omnes eámdem escam spiritálem manducavérunt, et omnes eumdem potum spiritálem bibérunt: (bibébant autem de spiritáli, consequénte eos, petra: petra autem erat Christus): sed non in plúribus eórum beneplácitum est Deo.
   Lección de la Epístola del Apóstol San Pablo a los . Corintios (IX, 24-27; X, 1-5) Hermanos: ¿No sabéis que los atletas que corren en el estadio, todos en verdad corren, pero uno sólo alcanza el premio? Corred vosotros de tal manera que lo alcancéis. Todo el que quiere luchar, de todo se abstiene: y esto hácelo por recibir una corona corruptible: en tanto que nosotros aspiramos a una incorruptible. Por eso yo corro no como quien corre a la aventura: y peleo, no como quien azota al viento; sino que castigo mi cuerpo y lo reduzco a servidumbre, temeroso de que, después de predicar a los demás, resulte yo reprobado. Porque no quiero, hermanos, que ignoréis que nuestros padres estuvieron todos a la sombra de la nube en el desierto, y todos pasaron el mar,l y todos dirigidos por Moisés, fueron bautizados en la nube y en el mar: y todos comieron un mismo manjar espiritual y bebieron la misma bebida espiritual (porque bebían de una piedra misteriosa que los iba siguiendo, piedra que era figura de Cristo): mas aun así, muchos de ellos desagradaron a Dios. 
Salmodia
   GRADUALE Ps. 9,10-11 et 19-20 Adjútor in opportunitátibus, in tribulatióne: sperent in te, qui novérunt te: quóniam non derelínquis quæréntes te, Dómine. V. Quóniam non in finem oblívio erit páuperis: patiéntia páuperum non períbit in ætéroum: exsúrge, Dómine, non præváleat homo.TRACTUS Ps. 129,1-4
De profúndis clamávi ad te, Dómine: Dómine, exáudi vocem meam. V. Fiant aures tuæ intendéntes in oratiónem servi tui. V. Si iniquitátes observáveris, Dómine: Dómine, quis sustinébit? V. Quia apud te propitiátio est, et propter legem tuam sustínui te, Dómine.
   Gradual - Tú eres, oh Señor nuestro socorro en los trances difíciles y en la tribulación: esperen en Ti los que te conocen, porque no abandonas a los que te buscan. V. Porque el desvalido no será siempre olvidado: la paciencia de los afligidos no se verá frustrada para siempre: levántate, Señor, y que no triunfe el hombre impío.   Tracto - Desde lo más profundo he clamado a Ti, Señor: Señor, oye mi voz. V. Presta oídos a la oración de tu siervo. V. Si tienes en cuenta nuestras culpas, Señor, ¿quién podrá subsistir delante de Ti? V. Pero en Ti se encuentra el perdón, y confiado en tus palabras espero en Ti, oh Señor. 
Evangelio
 U Sequéntia sancti Evangélii secúndum Matthæum. Matth. 20, 1-16 - In illo témpore: Dixit Jesus discípulis suis parábolam hanc: Símile est regnum cælórum hómini patrifamílias, qui éxiit primo mane condúcere operários in víneam suam. Conventióne autem facta cum operáriis ex denário diúrno, misit eos in víneam suem. Et egréssus circa horam tértiam, vidit álios stantes in foro otiósos, et dixit illis: Ite et vos in víneam meam, et quod justum fúerit, dabo vobis. Illi autem abiérunt. Iterum autem éxiit circa sextam et nonam horam: et fecit simíliter. Circa undécimam vero éxiit, et invénit álios stantes, et dicit illis: Quid hic statis tota die otiósi? Dicunt ei: Quia nemo nos condúxit. Dicit illis: Ite et vos in víneam meam. Cum sero autem factum esset, dicit dóminus víneæ procuratóri suo: Voca operários, et redde illis mercédem, incípiens a novíssimis usque ad primos. Cum veníssent ergo qui circa undécimam horam vénerant, accepérunt síngulos denários. Veniéntes autem et primi, arbitráti sunt quod plus essent acceptúri: accepérunt autem et ipsi síngulos denários. Et accipiéntes murmurábant advérsus patremfamílias, dicéntes: Hi novissimi una hora fecérunt, et pares illos nobis fecísti, qui portávimus pondus diéi, et æstus. At ille respóndens uni eórum, dixit: Amíce, non fácio tibi injúriam: nonne ex denário convenísti mecum? Tolle quod tuum est, et vade: volo autem et huic novíssimo dare sicut et tibi. Aut non licet mihi, quod volo, fácere? an óculus tuus nequam est, quia ego bonus sum? Sic erant novissimi primi, et primi novíssimi. Multi enim sunt vocáti, pauci vero elécti. Credo.  UContinuación del Santo Evangelio según San Mateon (XX, 1-16) -    En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: semejante es el reino de los cielos a un hombre, padre de familias, que salió muy de mañana a ajustar trabajadores  para su viña. Y habiendo convenido con los trabajadores en un denario por día, los envió a su viña. Y saliendo a eso del a hora de tercia, vio otros en la  plaza que estaban ociosos, y les dijo: Id también vosotros a mi viña, y os daré el salario justo. Y ellos fueron. Volvió a salir a eso de la hora de sexta y de nona, e hizo lo mismo. Salió por fin a eso de la hora de vísperas, y vio a otros que se estaban allí, y les dijo: ¿Qué hacéis aquí, todo el día ociosos? Y ellos le respondieron: Porque ninguno nos ha contratado. díceles: Id también vosotros a mi viña. Y al llegar la noche, dijo el dueño de la viña a su mayordomo: Llama a los trabajadores, y págales su jornal, comenzando desde los últimos hasta los primeros. Cuando vinieron los que habían ido a eso de la hora de vísperas, recibieron cada cual un denario. Y cuando llegaron los primeros, creyeron que recibirían más; pero no recibió sino un denario cada uno: Y al recibirlo murmuraban contra el padre de familias, diciendo: Estos últimos sólo han trabajado una hora, y los has igualado con nosotros, que hemos soportado el peso del día y del calor. Mas él respondió a uno de ellos, y le dijo: Amigo, no te hago ningún agravio: ¿no conviniste conmigo en un denario? Toma lo que es tuyo, y vete: pues yo quiero dar a este último tanto como a ti. ¿O es que no puedo yo hacer de lo mío lo que quiero? ¿Acaso tu ojo es malo, porque yo soy bueno? Así que los últimos serán los primeros, y los primeros, los últimos. Porque muchos son los llamados, mas pocos los escogidos.
 . Credo.   
OFFERTORIUM Ps. 91, 2 - Bonum est confitéri Dómino, et psállere nómini tuo, Altíssime.
   Ofertorio - Bueno es alabar al Señor y cantar salmos a tu nombre ¡oh Altísimo!
Oración-Secreta
SECRETA - Munéribus nostris, quæsumus, Dómine, precibúsque suscéptis: et cæléstibus nos munda mystériis, et cleménter exáudi. Per Dóminum.
   Ya que, has recibido oh Señor, nuestras oraciones y ofrendas, purifícanos con estos santos misterios y despacha favorablemente nuestros ruegos. Por Jesucristo Nuestro Señor  
   Prefacio de la Santísima Trinidad
    Vere dignum et justum ets aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus. Qui cumm unigenito  Filio tuo, et Spiritu Sancto, unus es Deus, unus es Dominus: non in unius singularitate personae, sed in unius Trinitate substantiae. Quod enim de tua gloria, revelante te, credimus, hoc de Filio tuo, hoc de Spiritu Sancto, sine differentia discretionis sentimus. Ut in confessione verae, sempiternaeque Deitatis, et in personis Proprietas, et in essentia unitas, et in majestate adoretur aequalitas. Quam laudat Angeli atque Arcangeli, Cherubim quoque ac Sraphim: qui non cessant clamare quotidie, una voce dicentes:   Verdaderamente es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar oh Señor Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios! Quien, con tu Hijo unigénito y el Espíritu Santo, eres un solo Dios, eres un solo Señor: no en la unidad de una sola persona, sino en la Trinidad de una sola sustancia. Porque cuanto creemos, por habérnoslo Tu revelado, acerca de tu gloria, creémoslo igualmente de tu Hijo, y del Espíritu Santo, sin haber diferencia ni separación. De modo que, al reconocer una sola verdadera y eterna Divinidad, sea también adorada la propiedad en las personas, la unidad en la esencia y la igualdad en la majestad. A la cual alaban los Ángeles y los Arcángeles, los Querubines y los Serafines, que no cesan de cantar diariamente, diciendo a coro:
COMMUNIO Ps. 30, 17-18 - Illúmina fáciem tuam super servum tuum, et salvum me fac in tua misericórdia Dómine, non confúndar, quóniam invocávi te.
   Comunión. - Haz brillar tu rostro sobre tu siervo, y sálvame por tu misericordia: señor, no sea confundido, pues yo te he invocado.
Oración-Postcomunión
  POSTCOMMUNIO - Fidéles tui, Deus, per tua dona firméntur: ut éadem et percipiéndo requírant, et quæréndo sine fine percípiant. Per Dóminum.     Haz, oh Dios, que tus fieles se sientan fortalecidos con tus dones; para que, recibiéndolos, más y más los busquen, y buscándolos, eternamente los gusten. Por Jesucristo Nuestro Señor. 

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