30/VI CONMEMORACIÓN DE SAN PABLO, Apóstol

30 de Junio

CONMEMORACIÓN DE SAN PABLOApóstol

He peleado el buen combate, he terminado la carrera,
he guardado la fe. No me queda sino esperar
la corona de justicia que me está reservada,
y que el Señor, justo Juez, me dará en el gran día,
a mí y a todos los que aman su venida. 

(2 Timoteo, 4, 7.8).

¿Quién podría enumerar los trabajos emprendidos por San Pablo, los peligros que ha afrontado, los países que ha recorrido, los pueblos que ha conquistado para la verdad? Nada asusta a su flaqueza: sabe que todo lo puede en Aquél que lo conforta; nada detiene ni cansa a su celo; sabe que tendrá la eternidad para descansar; nada calma la sed que tiene de sufrir: sabe que los sufrimientos de aquí abajo nada son comparados con el peso de eterna gloria que será su recompensa en el cielo.

MEDITACIÓN NUESTRAS BUENAS OBRAS
NOS SIGUEN AL OTRO MUNDO

I. Tener fervor en el servicio de Dios, es hacer todo lo que Dios nos pide con ardor, con prontitud y con alegría. Un hombre fervoroso vuela allí donde le llama el deber. Busca grandes ocasiones de dar a Dios pruebas de su amor; no desprecia las pequeñas; nada le parece difícil, por nada tiene lo que ya ha hecho, arde en deseos de hacer algo más heroico en lo por venir para la gloria de Jesucristo. ¿ Te hallas en estas disposiciones? Estuviste en ellas, ¿por qué no has perseverado? Vuelve lo antes posible a ese primer estado de fervor del que te relajaste.

   
II. Un hombre fervoroso resiste generosamente a todas las tentaciones; un hombre tibio y flojo sucumbe en ellas. Nada cuesta a un cristiano que está animado de este hermoso fuego: todo incomoda a un cristiano frío, todo le parece difícil e insoportable. El hombre fervoroso está siempre feliz y siempre contento, porque Dios derrama en su alma consolaciones celestiales para recompensarlo por los placeres del mundo que le sacrifica; el cristiano flojo y tibio no goza de los consuelos del Cielo, porque no es lo suficientemente fiel a Dios como para merecerlos.

III. El medio para encender el fervor en tu corazón es, en primer lugar, servir a Dios cada día como si cada día comenzases a servirle; es olvidar el poco bien qué ya hayas hecho, es considerarte como un servidor inútil. Compara lo que has hecho por Dios con lo que Jesucristo ha hecho por ti. En segundo lugar, cada día sirve a Dios como si fuese el último de tu vida. ¿Qué harías ahora si estuvieras seguro de morir mañana?

El fervor
Orad 
por los que trabajan
en la salvación de las almas.



ORACIÓN
  Haced, os lo suplicamos, Señor, que la intercesión del bienaventurado Roberto, abad, nos haga agradables a Vuestra Majestad, a fin de que obtengamos por sus oraciones las gracias que no podemos esperar de nuestros méritos. Por J. C. N. S. Amén.

29/VI SANTOS PEDRO Y PABLO, Apóstoles

29 de Junio

SANTOS PEDRO Y PABLOApóstoles

  A ti te daré las llaves del reino de los cielos;
todo lo 
que atares sobre la tierra, 
 será atado también en los cielos.
(Mateo, 16, 19).

   San Pedro, el Príncipe de los Apóstoles, y San Pablo, el Doctor de las gentes, cementaron con su sangre los cimientos de la Iglesia romana. San Pedro murió crucificado. A San Pablo se lo decapitó, el año 69. Los dos tuvieron la dicha de confirmar, con la efusión de su sangre, la doctrina que habían predicado con tanta elocuencia y confirmado con tantos milagros. Nerón, no te imagines haber triunfado: para siempre permanece la gloria del combate a favor de estos ilustres mártires, y muy pronto depondrán a tus sucesores de su trono; los césares abandonarán el Capitolio y cederán su lugar a los sucesores de San Pedro.

MEDITACIÓN SOBRE
SAN PEDRO Y SAN PABLO

I. San Pedro había sido testigo ocular de la mayoría de los milagros de Jesucristo, y, con todo, lo negó tres veces en la noche misma de su Pasión. ¡Cuánta es la fragilidad del hombre abandonado a su propia miseria! Humillémonos, trabajemos en nuestra salvación con temor y temblor. Pero no desesperemos: basta una sola mirada de Jesús para sacarnos del pecado. Lloremos, pues, a ejemplo de San Pedro, que derramaba un torrente continuo de lágrimas al solo recuerdo de su perfidia. ¡Que tus lágrimas sean como la sangre que brota de las heridas de tu corazón! (San Agustín).
  
II. San Pablo, de perseguidor de Jesucristo, llegó a ser el Apóstol de las gentes. ¿Qué somos nosotros? ¿Qué hemos hecho? Si nos hemos convertido como él, mantengámonos firmes en la virtud, y muramos antes que perder la gracia de Dios. Imitemos su paciencia en los sufrimientos, su celo por la salvación de las almas, su humildad, su amor por Jesucristo. Escuchemos lo que él nos dice: Sed mis imitadores como yo lo soy de Cristo.
   
III. Considera la honra que al presente reciben en la tierra estos dos Apóstoles. Los reyes, los emperadores y los papas se consideran dichosos de poder prosternarse ante las sagradas cenizas de un pescador y de un artesano, porque la santidad los ha hecho omnipotentes en el cielo. Ambiciosos: ¿qué son los honores del mundo, comparados a éstos? Regocijé monos de que Dios haya honrado tanto a sus servidores. Pero si los santos son así honrados en la tierra, ¿qué honores no recibirán en el cielo? Humillémonos, imitemos sus ejemplos y compartiremos su gloria.

La penitencia
Orad 
por el Papa.

ORACIÓN
  Oh Dios, que habéis consagrado este día con el martirio de vuestros Apóstoles San Pedro y San Pablo, haced que vuestra Iglesia sea fiel en la observancia de los preceptos de los que han sido los primeros ministros de la santa Religión que ella profesa. Por J. C. N. S. Amén

28/VI SAN IRENEO, Obispo y Mártir

28 de Junio

SAN IRENEOObispo y Mártir

Con sumo gusto sacrificaré todo y a mí mismo me
sacrificaré por la salvación de vuestras almas.

(2 Corintios, 12, 15).

   San Ireneo es el apóstol de Lyon. Enviado a esta ciudad por San Policarpo, discípulo del Apóstol San Juan, predicó allí el Evangelio, y fue elegido para suceder al obispo San Fotino. Consagró toda su vida a combatir a los herejes. San Agustín y varios otros Padres de la Iglesia hablan con admiración de la santidad de su vida y de la excelencia de su doctrina. Fue martirizado en Lyon con gran parte de los habitantes de esta ciudad, en la persecución de Se vero, hacia el año 203.

MEDITACIÓN SOBRE LA VIDA
DE LOS PRIMEROS CRISTIANOS

I. Considera lo que han sufrido los primeros héroes del cristianismo, en la ciudad de Lyon principalmente. Se los atormenta, se les confiscan los bienes, se los destierra, se los hace morir, todo sacrifican para conservar la fe. Compara sus sufrimientos con los tuyos. ¿No eres hijo descaecido de padres tan gloriosos? Si el cristiano es cargado de oprobios, se gloría de ellos; si es acusado, no se defiende; interrogado, confiesa la verdad; condenado, da las gracias. (Tertuliano).
   
II. Tanta era su mutua caridad que ponían sus bienes en común, dividiéndolos por igual entre ricos y pobres. ¿Qué se ha hecho esta caridad, entre los cristianos de nuestros días? La fe con la caridad es la fe del cristiano; la fe sin la caridad es la fe del demonio. (San Agustín).
   
III. La devoción a la Santa Eucaristía era la fuente de la constancia que mostraban en los tormentos estos ilustres soldados de Jesucristo. El pensamiento de los sufrimientos de Jesucristo sostenía su valor. Nosotros somos los hijos de esos santos, tenemos la misma fe, los mismos sacramentos; tenemos, además, el ejemplo de sus virtudes: nos es fácil imitarlos. ¿De dónde proviene, pues, que sucumbamos tan a menudo? Escuchemos las advertencias que estos gloriosos mártires nos dan desde el cielo. Guardaos, dicen, de perder en el puerto la fe que hemos conservado en medio de las tempestades. (San Euquerio).

La imitación de los primeros cristianos
Orad 
por los incrédulos.

ORACIÓN
   Oh Dios, que todos los años nos proporcionáis un nuevo motivo de gozo con la solemnidad de vuestro mártir y pontífice, el bienaventurado Ireneo, haced, en nuestra bondad, que honrando la nueva vida que ha recibido en el cielo, experimentemos aquí abajo los efectos de su protección. Por J. C. N. S.

27/VI NUESTRA SEÑORA DEL PERPETUO SOCORRO

27 de Junio

NUESTRA SEÑORA DEL PERPETUO SOCORRO

EL ORIGINAL ESTÁ EN LA IGLESIA
 DE SAN ALFONSO, EN ROMA

   
Pocos casos hay en la historia de la Iglesia de difusión tan rápida y universal de una devoción mariana como es la del culto al famoso cuadro de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. 
   Era el día 23 de junio del año 1867, domínica infraoctava del Corpus, cuando, en la iglesia de padres redentoristas de Roma, el decano del Capítulo Vaticano, patriarca de Constantinopla (después cardenal), daba comienzo a la ceremonia de coronación de la imagen de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Con anterioridad, el día 12 de mayo del mismo año, habían aprobado por unanimidad los capitulares el proyecto de coronación, declarando en público decreto que dicho cuadro reunía todas las condiciones para tal honor: antiquísimo culto de más de tres siglos y fama de muy milagroso. Se señaló para la litúrgica conmemoración. de aquélla fiesta la domínica que precede a la Natividad de San Juan Bautista. Hoy se celebra trasladada al 27 de junio en el calendario universal de la Iglesia. 
   ¿Cuál es la historia de este cuadro, desde entonces tan celebrado en las cinco partes del mundo?
   Precisamente uno de los diputados por el Cabildo Vaticano para la coronación era Pedro Wenzel, subprefecto después del Archivo Secreto Vaticano, quien, años andando, en 1903 comunicó a un padre redentorista, investigador del origen de este cuadro por Bibliotecas y Archivos vaticanos, un interesante documento manuscrito que constituía la fuente primaria para la historia de la venerada imagen. Hallábase el documento en un códice manuscrito de Franciscus Turrigius (s. XVI), También se hallaron dos relaciones del mismo en la obra manuscrita en veintiséis grandes volúmenes de Io. Antonius Brusius (s. XVII) sobre antigüedades sacras de Roma. El documento primitivo, escrito en pergamino, fijo en una tabla, estaba colocado en el cancel que cerraba el altar mayor de la iglesia de San Mateo in Merulana. Ambos autores copiaron el original, que, por ser largo, lo resumiremos aquí. 
   Un comerciante de Creta robó de una iglesia el cuadro milagroso y se dio a la mar, ocultando el cuadro entre las mercancías. Sobrevino una tempestad y todos, sin saber del cuadro, invocaban a la Virgen. Serenóse el mar y tomaron puerto. Un año después el comerciante, con el cuadro, llegaba a Roma. Enfermó el cretense y un amigo romano se lo llevó a su casa. En el trance de la muerte el cretense contó al romano el robo del cuadro, sin honor entre sus mercancías, rogándole que lo colocase en una iglesia donde se le diera culto. Lo prometió el romano. Muerto el mercader, hallaron, en efecto, el cuadro, mas la mujer del piadoso amigo persuadió a su marido a quedarse con el cuadro, reteniéndolo nueve meses. La Virgen, en una visión, dijo al romano que no hiciera tal, sino que lo colocara en lugar más decente. No obedeció. Volvió la Virgen segunda y tercera vez, amenazándole entonces con una mala muerte si no lo ponía en una iglesia. Temió el romano y rogó a su mujer que regalara el cuadro a alguna iglesia. Negóse ella con muchas razones y el marido se conformó. La Virgen volvió a hablar al romano: "Te avisé, te amenacé, no has querido obedecer. Tendrás que salir tú primero, para salir yo después en busca de lugar más honorable”. Y se murió el romano. Se apareció la Virgen a una hija suya de seis años y le dijo: "Avisa a tu madre y a tu tío, y diles que Santa María del Perpetuo Socorro quiere que la saquéis de casa si no queréis morir todos muy pronto". Contó la niña, temió la madre, que había tenido la misma visión, y se determinó a obedecer. Pero en esto una vecina, enterada de lo ocurrido, la decide con muchas y poco piadosas razones a que no lo haga. Volvió la vecina a casa, pero enfermó de peste. Entonces invocó a la Virgen y se curó. Volvió la Virgen a la niña para que dijese a su madre: que quería ser llevada a cierta iglesia llamada de San Mateo, entre Santa María la Mayor y San Juan de Letrán. Obedeció la madre y, avisando a los frailes agustinos que llevaban aquella iglesia, con acompañamiento de todo el clero Y pueblo fue trasladado el cuadro y el mismo día de la traslación hizo el primer milagro.
   La fecha de la traslación fue el 27 de marzo de 1499, reinando Alejandro VI, y la data del documento fue entre la fecha anterior y el año 1503, en que murió dicho Papa. Brutius decía que la letra y el color denunciaban la fecha. 
   Quedó allí la imagen durante tres siglos (1499-1798). Las tropas de Napoleón ocuparon Roma y, entre otras iglesias, derribaron la de San Mateo. Los agustinos irlandeses que la regentaban se pasaron con el cuadro a la próxima iglesia de San Eusebio y, de allí, a la de Santa María in Posterula. En el año 1855 tomaba el hábito de redentorista el joven Miguel Marchi. De niño había sido monaguillo en la casi extinta comunidad de agustinos, custodios del cuadro que ignoraban. Pero un lego, fray Agustín Orsetti, muy viejo, que había conocido el culto y los milagros de la Virgen olvidada, decía con frecuencia al monaguillo: "Sábetelo bien, Miguelito. La Virgen de San Mateo la tenemos en el oratorio. No lo olvides... ¡Era muy milagrosa!". Y no lo olvidó. Enterado el superior general de los padres redentoristas, reverendísimo padre Nicolás Maurón, se presentó con el padre Marchi a Pío IX. Le refirió el caso del milagroso cuadro, su paradero, ser voluntad de la Virgen exponerla al culto entre San Juan de Letrán y Santa María la Mayor, término que coincidía precisamente con el solar de los redentoristas. Acogió Pío IX las súplicas y pocos días después, por billete escrito de propio puño, ordenó (11 de diciembre de 1865) al cardenal prefecto de la Propaganda gestionase la entrega del cuadro a los padres redentoristas. Así se hizo. 
   El día 26 de abril de 1866 recorrió el cuadro de nuevo las calles de Roma. Al año siguiente, como dijimos al principio, fue coronado por el Cabildo Vaticano. Desde entonces no ha cesado su devoción de recorrer aldeas y ciudades de las cinco partes del mundo con gran fruto espiritual de conversiones. 
   El cardenal Francisco Ehrle, S. I., decía a un padre redentorista: "No hay Virgen romana más documentada que la Virgen del Perpetuo Socorro".
   Descripción del cuadro.-Su tamaño es de 53 por 41,5 centímetros. Está pintado al temple y en nogal. Fue restaurado por el artista polaco Novodny en 1866. La Virgen viste túnica roja, peplos o manto azul marino con vueltas verdes y esclavina. El quecrúfalos, redecilla o pañuelo verde, le recoge el cabello. El Niño viste túnica verde con cinturón púrpura y manto marrón claro. A la derecha de la figura San Miguel, túnica jacinto, manto y paño de honor verdes. A la izquierda, San Gabriel, túnica, manto y paño de honor jacinto. Todos los personajes nimbados. Los pliegues de los paños van acusados con reflejos de oro. El fondo es oro. Los personajes llevan sus nombres en abreviaturas griegas: Jesús-Cristo, Madre de Dios, el arcángel Miguel, el arcángel Gabriel. Los trazos sobre las letras son signos ortográficos y de abreviación.
   Composición del cuadro.- No es una simple imagen o retrato de María. Es una escena, una especie de cuadro de género. Para ello no basta que haya en la escena varios personajes. Es preciso que el pedazo de vida que allí se vive encadene y relacione a los personajes unos con otros, no con inscripciones o guiones, sino con el gesto, la mirada, el sentido. Es un momento simbólico de la vida de María.
   Su momento feliz es interrumpido por una visión terrible: la Pasión, cuyos instrumentos presentan los ángeles al Niño. Este vuelve la mirada consternado hacia la aparición. Con el movimiento brusco de terror contrae el pie izquierdo y la sandalia se le desprende. Las manecitas se aferran al pulgar de la Madre. Por eso la llaman a veces los rusos la Virgen del pulgar (Taletskaia Bojia Mater). La mirada de la Virgen trasciende el cuadro y pasa al espectador.
   Escuela y fecha.- La flexibilidad de la escena denota la presencia del realismo italiano. Sin embargo, la técnica es bizantina. Su dibujo es más rígido que el de sus contemporáneos italianos, tiene más de calco que de inspiración personal. No es un cuadro hecho en Italia como sus congéneres de Cimabue, Bernabé de Módena y Botticelli. Es un cuadro bizantino con influencias italianas. La isla de Creta era entonces colonia veneciana. Un ejemplar de nuestro cuadro está firmado por Andreas Rico de Candía (s. XV). El nuestro parece más antiguo que sus similares esparcidos por Italia. Kondakof y Muratof, disintiendo a veces, convienen en la inspiración italiana y lo atribuyen a la escuela ruso-bizantina de Novgorod, entre los siglos XIV y XV. En Rusia las Metsnaia ikona (imágenes de asiento) o Poklonnaia ikona (imágenes grandes) estaban fijas en el Iconostasio. Las Vírgenes de la Pasión (nuestro cuadro) eran imágenes de la devoción íntima y se llamaban Domovaia (imagen doméstica) o Molennaia ikona (imagen pequeña).
   Los papas han tenido siempre particular devoción al cuadro de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Pío IX lo regaló a los católicos de Zitomir (Rusia), que le pedían una de las Vírgenes más veneradas en Roma. León XIII se la dio a los misioneros de la Asunción que partían para Bulgaria. San Pío X la regaló a la emperatriz abisinia Taitú. Benedicto XV la tenía sobre su trono; para el 50 aniversario de la exposición al culto del prodigioso cuadro acuñó, a sus expensas, una medalla conmemorativa con su busto y la imagen del Perpetuo Socorro. Pío XI la puso en el escudo de la misión pontificia para socorrer a los niños hambrientos de Rusia. Hoy se la considera como símbolo de enlace entre la Iglesia romana y las Iglesias orientales disidentes, para la unión. Es cosa menos que interminable enumerar las naciones y centros en que a la Virgen del Perpetuo Socorro se le tributa culto especial. Baste decir que se halla extendida su devoción por las cinco partes del mundo. Sólo destacaremos las formas más significativas de este culto.
   Existe la Archicofradía de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, de la que Pío IX quiso ser el primer archicofrade, encabezando las listas. También lo fue Alfonso XIII, cuya curación, en una gripe infantil, se atribuyó a una estampa de la Virgen colocada en su cuna. La Archicofradía tiene una sección especial: la Súplica Perpetua, por la que los socios se comprometen a orar media hora todos los meses ante el cuadro. Está también en plena vitalidad la Visita Domiciliaria por medio de capillas portátiles. En muchos países extranjeros existe la Novena Perpetua, sobre todo en los pueblos anglosajones, originaria de los Estados Unidos, que celebra una función religiosa como de media hora un día a la semana, durante todo el año. Pero esa función se repite, como en San Luis (Estados Unidos) once veces por día, para dar entrada a las oleadas de devotos. Estos, en la iglesia de Boston, no bajan de 20.000 el día semanal de la novena. El centro de Manila es asombroso. En Baclarán, barrio de la capital, se ha construido una iglesia capaz para 12.000 personas. En los días de Novena Perpetua el municipio organiza servicio especial de tranvías y autobuses, con un promedio de 60.000 asistentes en los siete ejercicios al día. El delegado apostólico, monseñor Panico, decía: “La Novena Perpetua es la gracia más grande que Dios ha dado a Filipinas después de su conversión al cristianismo". A estas Novenas Perpetuas asisten muchos no católicos. El padre Juan Herat, oblato de María Inmaculada, decía que, en su parroquia de Colombo, asistían los miércoles de la Novena 30.000 personas entre católicos, hindúes, budistas, mahometanos, parsis y protestantes. Francia, Italia, Bélgica, Holanda, Alemania, Inglaterra la tienen en la mayor parte de sus iglesias. Son cientos de miles los lugares misionados adonde se ha llevado el cuadro y su devoción. Varios cientos de miles suman los ejemplares de las revistas de su nombre. Los altares erigidos en su honor son innumerables. Un cronista extranjero contaba por el año 1916 unos 1.200 altares sólo en pueblos de Andalucía. En España, además de la devoción privada que todo español conoce, tiene esta Virgen el homenaje de instituciones públicas de que es ella Patrona, así: Sanidad Militar, Colegios Médicos, Beneficencia Municipal de Madrid, en el Ministerio de la Gobernación, Asociación Mutua de Socorros, el Seguro Español, Mutualidad de Peritos del Ministerio de Agricultura, Ministerio de Hacienda. En Méjico y en las naciones de Centro y Sudamérica florece la devoción en prácticas piadosas y frutos de bendición, como en cualquier nación europea.
   No basta la distancia remota de los pueblos para limitar su devoción. A principios de siglo unos misioneros austriacos, en misión rodante por el Transiberiano, llevaron el cuadro desde Moscú a VIadivostok. En Africa lo presentan al culto los misioneros del Alto Níger (franceses), del Congo (belgas), de Africa del Sur (ingleses). También en Oceanía los misioneros de Nueva Guinea. Siete catedrales de Australia y Nueva Zelanda celebran la Novena Perpetua. En Newcastle (Oceanía) cinco estaciones radiofónicas comerciales transmiten la Novena Perpetua. En 1948 el padre Henry, oblato de María Inmaculada, llevaba el cuadro al Polo Norte, al 70º de latitud, península de Boothia.
   Como se ve, esta devoción tiene un marcado carácter universalista, con un fruto abundante de conversiones.
 RODRIGO BAYÓN, C. SS. R.


ORACIÓN A NUESTRA SEÑORA DEL SOCORRO
   Oh María, Madre bendita del Socorro, concededme que siempre pueda invocar vuestro dulcísimo Nombre porque él es ayuda del que vive y salud del que muere. Oh, Virgen Santísima del Socorro, haced que vuestro nombre sea de hoy en adelante la respiración de mi vida. Señora y Madre mía, no tardéis en socorrerme siempre que os llame, ya que en todas las tentaciones que han de combatirme, en todas las necesidades que se me presenten yo no quiero nunca dejar de llamaros, exclamando siempre: María, Madre mía. ¡Qué alivio, qué dulzura, qué confianza y qué ternura siente mi alma con sólo invocar vuestro nombre y con sólo pensar en Vos! Mil gracias doy a Dios por haberme dado para mi bien este nombre tan dulce, tan amable y tan poderoso; y V os, oh portentoso Señor de los Milagros, concededme que escudándome bajo el nombre y la protección de la Virgen Santísima del Socorro, merezca, por su intercesión, verme libre de todo peligro y de todo mal en la tierra, a fin de poder bendecir su nombre y adoraros a Vos en la eterna bienaventuranza. Así sea. 



*Año Cristiano, Tomo II, biblioteca de Autores Crisitianos, Madrid, 1966.

MISA DEL DOMINGO TERCERO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

DOMINGO INFRAOCTAVA DEL SGDO. CORAZÓN Y TERCERO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

(Doble - Ornamentos verdes)
   
  La liturgia de este día canta las divinas misericordias para con los hombres. Porque así como Jesús vino a llamar no tanto a los justos como a los pecadores, no a curar a los sanos, sino a los enfermos; así el Espíritu Santo, que continúa la obra de Jesús en los corazones, viene a establecer el reinado de Dios en las almas pecadoras oras, y esto mismo proclama la Iglesia en el Breviario y en el Misal.
      En Maitines leemos hoy la historia de Saúl. Muerto el sacerdote Helí, los Israelitas habíanse puesto en manos del profeta Samuel, considerándole un nuevo Moisés; pero viéndole ya anciano, pidiéronle un rey que los gobernase; y Samuel, accediendo a sus deseos, les nombró y consagró como rey a un apuesto joven de la tribu de Benjamín, llamado Saúl.
   Unas asnillas de su padre se habían extraviado y él andaba en su busca cuando llegó a Rama, en donde estaba entonces Samuel. Fuése en seguida a preguntar al profeta por el paradero de las asnillas, "Las asnillas, le dijo Samuel, han sido encontradas hace tres días".
   El día siguiente, Samuel tomó su cuerna de aceite, y la derramó sobre la cabeza de Saúl.
Dícenos San Gregorio, en el 2º Nocturno de Maitines que "Saúl, enviado por su padre a buscar las asnillas perdidas, es figura de Jesús, el cual fué enviado por su Padre en busca de las almas que se habían extraviado.
   El enemigo está merodeando continuamente en torno nuestro, buscando a quien devorar, y así como Saúl fue ungido para defender a su pueblo, así Cristo, el Ungido por excelencia, vino a librarnos del enemigo infernal.
Cuadra muy bien esto con el Evangelio, en que vemos al buen Pastor buscando a la oveja descarriada y cargando con ella sobre sus hombros, conduciéndola así al aprisco: representación que, después y ya en los siglos primeros, fue tan frecuente en la iconografía cristiana.
   La Epístola nos aconseja también que andemos con cautela por causa del enemigo que anda al acecho, cual león rugiente, que busca a quien devorar. Pero, gracias a la fortaleza y a la confianza que la fe nos da, "nos ponemos totalmente en manos de Dios, pues Él cuida de nosotros" (Ep.), y nos pone al abrigo de todos nuestros enemigos (Grad.); es el protector de los que esperan en Él (Or.), y no abandona a los que le buscan (Ofert.).
   Pero al recordar la suerte desastrosa de Saúl, que se envaneció con los dones de Dios, y le desobedeció temerario, sin querer reconocer sus yerros, "humillémonos delante de Dios" (Ep.) y digámosle: "¡Dios mío! considera mi miseria y ten piedad de mi" (Int.); y como quiera que sin Ti nada hay robusto, nada santo, haz que usemos de tal modo de los bienes temporales que no perdamos los eternos (Or.). Danos por fin en la tentación "firmeza inquebrantable" (Ep.).
   El párroco celebra ho la Misa por sus feligreses.

IntroitoPs 24
    INTROITUS Respice in mei, Domine, quoniam unicus et pauper sum ego vide humilitatem meam, et laborem meum, et dimitte omnia peccata mea. Deus meus. Ps. Ad te, Domine, levavi animam meam: Deus meus, in te confido, non erubescam.V. Gloria Patri, V. Gloria Patri.   Introito - Mírame, Señor, y ten misericordia de mí, porque me veo solitario y pobre: considera mi humillación y mi pena, y perdóname todos mis pecados, oh Dios mío. - Ps. A ti, Señor, levanté mi espíritu: oh Dios mío, en ti confío, haz que no sea yo confundido. V. Gloria al Padre.
Oración-Colecta
   ORATIO - Protector in te sperantium Deus, sine quo nihil est validum, nihil sanctum: multiplica super nos misericordiam tuam; ut, te rectore, te duce, sic transeamus per bona temporalia, ut non amittamus aeterna. Per Dominum.
  Per Dóminum.    R. Amen   
    Oh Dios, protector de los que en ti esperan, y sin el cual nada es valedero, nada santo: multiplica sobre nosotros tu misericordia, de suerte que, siendo Tú nuestro pastor y guía, de tal modo usemos de los bienes temporales, que no perdamos los eternos(1). Por Nuestro Señor Jesucristo, etc.   R. Amen.
2ª Oración-Colecta (del Sagrado Corazón)
   ORATIO - Deus qui nobis, in Corde Fili tui, nostris vulneráto peccátis, infinitos directiónis thesáuros misericórditer largíri dignáris; concéde, quaesumus, ut illi devótum piétatis nostrae praestántes obséquium, dignae quoque satisfactiónis exhibeámus officium. Per eúndem Dóminum.   R. Amen       Oh Dios, que misericordiosamente te dignas prodigarnos los infinitos tesoros de tu amor, en el Corazón de tu Hijo herido por nuestros pecados, rogámoste nos concedas la gracia de poderte tributar el devoto homenaje de nuestra piedad, a la vez que cumplimos con el deber de darle una competente satisfacción. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor etc.   R. Amen.
Epístola
   Las tribulaciones y tentaciones de esta vida debemos soportarlas amorosa y resignadamente, convencidos de que son permitidas por Dios, a quien ninguna criatura tiene derecho de pedirle razón de su proceder, y seguros de que en todo busca nuestro bien.
EPISTOLAELectio Epistolae beati Petri Apostoli  (1, 5, 6-11)  - Carissimi: Humillamini sub potenti manu Dei, ut vos exaltet in tempore visitationis; omnem sollicitudinem vestram projicientes ein eum, quoniam ipsi cura est de vobis. Sobrii estote, et vigilate: quia adversaries vester diabolus tamquam leo rugiens circuit, quaerens quem devoret: cui resistite fortes fide scientes eamdem passionem ei, quae in mundo est, vestrae fraternitati fieri. Deus autem omnis gratiae qui vocavit nos in aeternam suam gloriam in Christo Jesu modicum passos ipse perficiet, confirmabit solidabitque. Ipsi imperium in saecula saeculorum. Amen

   Lección de la Epístola del Apóstol S. Pedro - Carísimos: Humillaos bajo la mano poderosa de Dios, para que os ensalce cuando venga a juzgarnos: descargando en Él todas vuestras preocupaciones, puesto que Él tiene cuidado de vosotros. Sed sobrios, y vigilad, porque vuestro enemigo, el diablo, anda girando, como un león rugiente, a vuestro alrededor, buscando a quién devorar. Resistidle firmes en la fe, sabiendo que la misma tribulación padecen los hermanos que con vosotros viven en el mundo(2). Mas Dios, dador de toda gracia, que nos llamó a su eterna gloria, por Jesucristo, después que hayáis padecido un poco, Él mismo os perfeccionará, fortalecerá y consolidará. A Él por tanto, sea dada la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Así sea.
    GRADUALE (Ps. 54, 23, 17, 18 et 19 ) Jacta cogitatum tuum in Domino: et ipse te enutriet. V. Dum clamarem ad Dominum, exaudivit vocem meam ab his, qui appropinquant mihi.   Alleluia, alleluia. V.(Ps. 7, 12) - Deus judex Justus, fortis et patiens, numquid frascitur per singulos dies?, Alleluia.   Gradual - En Dios esperó mi corazón, y fue socorrido; y refloreció mi carne, y con todo mi corazón le alabaré. V. A Ti, Señor, clamaré. No te hagas sordo a mis ruegos, oh Dios mío, no te alejes de mi.
Aleluya, aleluya - V.  Alabad a Dios, nuestro ayudador, celebrad al Dios de Jacob; cantad himnos suaves con la cítara, Aleluya. 
Evangelio
      Jesús acoge con particular predilección a los pecadores, sin hacer caso de las críticas de los fariseos, y expresa, con dos comparaciones caseras, su inmenso gozo por la conversión de uno solo de ellos. ¡Es el Amor misericordioso de Dios inclinándose con ternura hacia la miseria humana!
USequéntia sancti Evangélii secúndum Lucam 15, 1-10,)
   In illo témpore: Erant autem appropinquantes ad Jesum publicani et peccatores ut audirent illum. Et murmurabant Pharisaei et scribae dicentes: Quia hic peccatores recipit et manducat cum illis. Et ait ad illos parabolam istam dicens: Quis ex vobis homo qui habet centum oves et si perdiderit unam ex illis nonne dimittit nonaginta novem in deserto, et vadit ad illam, quae perierat, donec inveniat illam? Et cum invenerit eam inponit in humeros suos gaudens: et veniens domum convocat amicos et vicinos dicens illis: Congratulamini mihi, quia inveni ovem meam, quae perierat? Dico vobis, quod ita gaudium erit in caelo super uno peccatore poenitentiam agente quam super nonaginta novem iustis qui non indigent poenitentia Aut quae mulier habens dragmas decem si perdiderit dragmam unam nonne accendit lucernam et everrit domum et quaerit diligenter donec inveniat? Et cum invenerit convocat amicas et vicinas dicens: Congratulamini mihi, quia inveni drachmam quam perdideram? Ita dico vobis gaudium erit coram Angelis Dei super uno peccatore paenitentiam agente 
Credo.
  Continuación del Santo Evangelio según San Lucas - En aquel tiempo: Se acercaban a Jesús los publicanos y pecadores para oírle; mientras los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este recibe a los pecadores, y come con ellos. Y les propuso esta parábola: ¿Quién de vosotros es el hombre que tiene cien ovejas, y si perdiere una de ellas, no deja las noventa y nueve en la dehesa y va a buscar la que se perdió hasta encontrarla? Y en hallándola, se la pone sobre sus hombros muy gozoso: y al llegar a su casa, llama a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Congratulaos conmigo, porque he hallado mi oveja, que se había perdido. Os digo, que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que hiciere penitencia, que por noventa y nueve justos, que no han menester de penitencia(3). O ¿qué mujer, que tenga diez dracmas, si pierde una(4), no enciende la lámpara, y barre la casa, y lo registra todo hasta hallarla? Y después que  la ha hallado, convoca a las amigas y vecinas diciendo: Cangratuláos conmigo, porque he hallado la dracma, que había perdido. Así os digo yo, que habrá gozo delante de los Ángeles de Dios por un pecador que haga penitencia. Credo
    OFFERTORIUM Sperent in te omnes, qui noverunt nomen tuum, Domine: quoniam non derelinquis quaerentes te: psalite Domino, qui habitat in Sion: quoniam non est oblitus orationem pauperum.

Secreta – Respice, 
   Ofertorio -  Esperen en ti, Señor, cuantos conocen tu nombre, porque no abandonas a los que te buscan; cantad al Señor, que mora en Sión: porque no echa en olvido la oración de los pobres.
Oración-Secreta
    Répice, Domine, munera supplicantis Ecclesiae: et saluti credentium perpetua sanctificatione sumenda concede. Per Dominum.    Mira, Señor, favorablemente, los dones de la Iglesia suplicante; y haz que los fieles los reciban para su salud y perpetua santificación. Por Nuestro Señor Jesucristo, etc.  
2ª Oración-Secreta (del Sagrado Corazón)
    Répice, quaesumus, Domine, ad ineffábilem cordis dilécti Filii tui caritátem: ut quod offérimus sit tibi munus accéptum, et nostrórum explátio delictrórum. Per Dominum.    Suplicámoste, Señor, que mires a la inefable caridad del Corazón de tu querido Hijo para que el don que te ofrecemos te sea a Ti agradable, y a nosotros nos sirva de expiación de nuestros delitos. Por Nuestro Señor Jesucristo, etc.  

Prefacio del Sagrado Corazón
    Vere dignum et justum est aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias ágere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus. Qui Unigenitum tuum in cruce pendéntem láncea militis transfigi voluísti, ut apértum Cor, divinae largitatis sacrárium, torrentes nobis fúnderet miserationis et gratiae, et quod amóre nostri flagráre numquam déstitit, piis esset réquies et poeniténtibus patéret salútis refúgium. Et ideo cum Angelis et Arcangelis, cum Thronis et Dominatiónibus, cumque omni milítia caeléstis exércitus, hymnum glóriae tuae cánimus, sine fide dicéntes:   Sanctus, Sanctus, Sanctus...

   Verdaderamente es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar oh Señor Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios! Que quisiste que tu Hijo unigénito pendiente de la cruz fuese atravesado por la lanza del soldado, para que su Corazón abierto, sagrario de tu divina liberalidad, derramase sobre nosotros los torrentes de la misericordia y de la gracia; y ya que nunca dejó de estar abrasado por nuestro amor, fuese para las almas piadosas un lugar de descanso, y un refugio de salvación abierto para los pecadores. Y por eso, con los Ángeles y los Arcángeles, con los Tronos y Dominaciones, y con toda la milicia del ejército celestial, cantamos el himno de gloria, diciendo sin cesar:  Santo, Santo, Santo, etc.
   COMMUNIO  Dico vobis: gaudium est Angelis Dei super uno peccatore paenitentiam agente. 
   Comunión. - Yo os aseguro que los Ángeles de Dios se alegran por un pecador que hace penitencia.
Oración-Postcomunión del día
     Sancta tua, nos, Domine, sumpta vivificent: et misericordiae sempiternae praeparent expiatos. Per Dominum Per Dominum nostrum   Haz, Señor, que el sacramento que acabamos de recibir nos vivifique, y que expiando nuestras culpas nos vaya disponiendo a recibir la eterna recompensa(5). Por Nuestro Señor Jesucristo.

Oración-Postcomunión (del Sagrado Corazón)
     Praebeant nobis, Domine Jesu, divinum tua sancta fervórem; quo dulcíssimi Cordis tui suavitáte percépta, discámus terréna despícere, et amáre caelestia: Qui vivis..    Dínate hacer, oh Señor Jesús, que estos santos misterios nos comuniquen un fervor divino: con el cual, después de haber gustado la suavidad de tu dulcísimo Corazón, aprendamos a despreciar las cosas terrenas, y a amar las celestiales:Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.

  • (1)  Que Hermosa oración! Sin la intervención de Dios, nada en el mundo ni en el individuo puede durar, ni ser meritorio, ni realmente eficaz. Por que fallan los pactos de las Naciones? Por que no surten valor muchos contratos de los hombres? Por que fracasan muchas empresas, al parecer sólidamente lanzadas? Es que se ha procedido sin Dios. Los sin Dios no son solamente las milicias comunistas: aun entre los cristianos son legión. 
  • (2) Espiritualmente es esto siempre cierto, pues nuestras tribulaciones son incesantes: pero históricamente alude San Pedro aquí a la primera persecución de Nerón, que acababa entonces de estallar.
  • (3) Entiéndase bien esta frase: quiere decir, que en la conversión de un pecador hay una razón especial de gozo y hasta una exteriorización mayor de triunfo, como la hay en la recuperación de la salud de un enfermo grave, El padre se goza de una manera especial por la salud recobrada de un hijo enfermo, y la celebra; mientras nada especial hace para celebrar la salud de los demás hijos sanos.
  • (4) La dracma vendría a valer unos 0.50 centavos de nuestra moneda.
  • (5) Recompensa no merecida, por cierto, sino fruto de la divina misericordia.

26/VI SANTOS JUAN y PABLO, Mártires

26 de Junio

SANTOS JUAN y PABLOMártires

Honrad a todos, amad a los hermanos,
temed a Dios, 
honrad al rey. 
(1 Pedro 2,17).

   San Juan y San Pablo eran hermanos, Constancia, hija de Constantino, en reconocimiento de sus leales servicios, les había legado una fortuna considerable de que se sirvieron para alimentar a los pobres de Jesucristo. El emperador Juliano los invitó a ir a su corte; pero respondieron que no querían tener trato con un príncipe que había renunciado a Jesucristo. Dióles el emperador un plazo de diez días para que se determinasen a adorar a Júpiter, lapso que aprovecharon para distribuir a los pobres los bienes que les quedaban. Cuando, al cabo de los diez días, Terenciano, capitán del cuerpo de guardias, vino a preguntarles qué decisión habían tomado, le respondieron que estaban dispuestos a dar la vida por el Dios que adoraban. Y fueron decapitados. El hijo de Terenciano fue librado del demonio que lo poseía, en la tumba de estos mártires. Este milagro convirtió a su padre.

MEDITACIÓN SOBRE TRES CLASES
DE IMÁGENES DE DIOS

I. Hay imágenes vivas del verdadero Dios, y Él nos manda que las honremos. Son nuestros superiores espirituales y todas las personas consagradas a Dios. Son imágenes de Jesucristo. Les ha participado su autoridad. Quien los menosprecia, al Salvador mismo menosprecia. El honor que les rinde recae sobre Jesucristo mismo que los ha enviado. Sus defectos personales no te deben impedir honrar el carácter que invisten. Quien os desprecia, a Mí me desprecia, quien os escucha, a Mí me escucha. (Jesucristo).

II. Los príncipes y los reyes, vuestros padres, vuestros patronos, vuestros superiores temporales también merecen que los honres como a imágenes de Dios, y como a sus lugartenientes en la tierra. La autoridad que tienen sobre ti de Dios proviene; debes obedecerles mientras no te manden nada contrario a la ley divina. Pero si, como Juliano el Apóstata, quieren apartarte del servicio de Dios, no tengas con ellos complacencias criminales. No seas como esos paganos, que tienen más respeto para el emperador que para sus dioses. (Tertuliano).

III. Los santos que viven en la tierra, tanto como aquellos que reinan ya en el cielo, son las imágenes más perfectas de Jesucristo, porque los ha hecho partícipes de su santidad; les debes, a este título, honores totalmente particulares. Ten devoción, pues, a los santos que están en el cielo. Respeta a los que viven en la tierra y busca su compañía. Conversando con ellos aprenderás a imitar a Jesucristo, cuyas copias fieles son: Despójate de la figura del siglo, y fórmate según la imagen del Salvador. (San Pedro Crisólogo).

El vencimiento del respeto humano
Orad 
por los pastores de la Iglesia.

ORACIÓN

   Haced, os lo suplicamos, Dios omnipotente, que experimentemos este día doble gozo con ocasión del triunfo de los bienaventurados Juan y Pablo, a quienes una misma fe y un mismo martirio hicieron verdaderamente hermanos. Por J. C. N. S. Amén

A LA VIRGEN DEL CARMEN EN SÁBADO

   FELICITACIÓN SABATINA A LA VIRGEN DEL CARMEN

Para los fieles devotos y Terciarios Carmelitas

(ESCAPULARIO DEL CARMEN)



Oración preparatoria


   ¡Oh Virgen Santísima del Carmen, Reina gloriosa de cielos y tierra! Vengo a honrarte en este día escogido por Ti para mostrar tu gloria, tu poder y tu misericordia. Acuérdate que a tus queridos cofrades, por tu santo y bendito Escapulario, les has prometido ayuda en la vida, amparo en la muerte y socorro en el Santo Purgatorio. Mírame con ternura, amorosa Madre, y mira también misericordiosamente a las almas que en el Purgatorio se encuentran y acepta ésta mi felicitación y visita sabatina, como homenaje de mi amor y cariño y para alivio de las almas que sufren, para que todos juntos te alabemos algún día feliz en el cielo. Amén.

Aspiraciones


  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo mis propias necesidades. Avemaría...
  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo las necesidades de mi familia. Avemaría...
  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo las necesidades de mis parientes. Avemaría...
  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo las necesidades de mis amigos. Avemaría...
  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo las necesidades de la Iglesia. Avemaría...
  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo las necesidades de la Nación. Avemaría...
  • Virgen del Carmen, te felicito por tu gloria y te encomiendo las necesidades de las almas del Purgatorio. Avemaría...


Oración final

Gracias mil, Madre querida, por todos los favores que de tu bondadosa mano he recibido, particularmente el de haberme escogido, por tu santo Escapulario, para verdadero hijo tuyo. Yo quiero alabarte siempre, y es mi deseo que mi lengua cante tus bondades sin cesar y mi corazón te ame y que te quiera como a la mejor y mas cariñosa de las madres. Me regocijo por la inmensa gloria que en el cielo gozas, del poder que sobre todo lo creado tienes, de las virtudes soberanas que tu alma adornan. Sírvete, Madre mía de esa gloria, de ese poder y de esas virtudes para ampararme en la vida y en la muerte, para cubrir mi pobreza y desnudez, para librarme de tantos y tan fieros enemigos como me rodean, para salvarme y ser feliz en el cielo por toda la eternidad. Amén.

25/VI SAN GUILLERMO, Abad

25 de Junio

SAN GUILLERMOAbad

Tened un mismo sentir, conservad la paz, y el Dios
de la paz y del amor estará con vosotros.
(2 Corintios, 13, 11).

 San Guillermo, para dedicarse más libremente a la oración, se retira al Monte Virgen en el reino de Nápoles; pero su reputación de santidad síguelo a su retiro, y lleva a él a gran número de personas que desean practicar, bajo su dirección, los ejercicios de la vida ascética. Llégasele también una mujer para tentarlo. Revuélcase el santo sobre carbones encendidos y Dios no permite que sufra la menor quema dura. Su muerte, predicha por él, tuvo lugar el 25 de junio de 1142.

MEDITACIÓN

SOBRE LA PAZ DEL ALMA

I. Vive en paz con el prójimo; disimula, sufre antes de romper la paz y faltar a la caridad. Si algún acontecimiento viene a turbar esta paz, restablécela lo antes posible: cede algo de tus derechos, en interés de la paz y de la unión. En esto se conocerá si eres imitador de Jesucristo, si amas la paz y la caridad; y esta paz, que conservas con todos, es guerra cruelísima que haces al demonio. La paz entre vosotros es la guerra contra él. (Tertuliano)

II. Con todo, es preciso romper esta paz con el prójimo, cuando ella te obligue a hacer la guerra a Dios. Tienes un amigo peligroso, un pariente que te arrastra al vicio, un inferior que se entrega al libertinaje; es preciso advertirle, aun a riesgo de que se aleje de ti y se haga tu enemigo: vale más romper con los hombres que con Dios. Ninguna paz con los pecadores, ninguna paz con el vicio. Esa calma sería una tempestad. (San Jerónimo).

III. Conserva no obstante la paz de tu alma, al precio que sea. El espíritu de Dios ama a los corazones apacibles y a las almas tranquilas. Si siempre te acuerdas que Dios permite todo lo que te sucede, para su gloria y para tu mayor bien, los acontecimientos, aun los más fastidiosos, no podrán alterar tu paz, ni arrebatar tu dicha. ¿Qué más precioso y más dulce para el corazón, qué más calmo y más tranquilo en la tierra que una buena conciencia? (San Bernardo).

La paz del alma
Orad 
por la paz en el seno
de las familias.

ORACIÓN

   Oh Dios, que habéis dado el ejemplo y la ayuda de los santos para abrir a nuestra flaqueza el camino de la salvación, haced que honrando los méritos del bienaventurado Guillermo, abad, aprovechemos sus sufragios y caminemos siguiendo sus huellas. Por J. C. N. S. Amén

24/VI NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA

24 de Junio

NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA

  En verdad, os digo, ninguno de entre los hijos
de mujer ha sido mayor que Juan Bautista.

(Mateo, 11, 11).

   Toda la tierra se alegra del nacimiento de San Juan; pero, ¿no debemos nosotros afligirnos al comparar lo que él ha hecho con lo que hacemos nosotros? Él deja el mundo y se retira al desierto para hacer penitencia; su alimento es un poco de miel silvestre con langostas; su vestidura, la piel de un camello. Sus ejemplos, más aun que sus palabras, son una exhortación a la penitencia. Viendo a Jesucristo, ex clama: He ahí el Cordero de Dios que quita los peca dos del mundo; y el Salvador quiere ser bautizado por él.

MEDITACIÓN
SOBRE SAN JUAN BAUTISTA
   
I. He aquí un penitente que no es culpable de pecado alguno, y a quien la presencia de Jesús,  oculto en el seno de su Madre, ha purificado antes de su na cimiento hasta de la mancha original. ¿Qué falta había cometido él cuando se retiró al desierto a hacer penitencia? Nos enseña con ello que el hombre, aun el más inocente, debe hacer penitencia. ¿Comenzaste tú este ejercicio? Te parece muy penoso, y he aquí un niño que lo hace como juego. Pon manos a la obra, y pronto experimentarás cuán indecible satisfacción reserva Dios a los que renuncian al placer para darse a Él. ¡Cuán instantáneamente pareció dulce a mi corazón privarse de las dulzuras de las vanidades del mundo! Temía perderlas, y dejarlas llegó a ser para mí la fuente de la dicha. (San Agustín).
   
II. Temprano comienza este santo su penitencia y la prolonga hasta el fin de su vida. No basta que te mortifiques por algún tiempo, hay que hacerla hasta la muerte. Siempre tienes contra ti a tu cuerpo, al demonio y al mundo. El único medio para triunfar de estos tres enemigos es combatirlos sin des canso hasta el fin. Piensa en el infierno que debes evitar, en el paraíso que debes ganar, y nunca te cansarás de hacer penitencia.
   
III. Si la humildad no las acompaña, tus austeridades no te servirán sino para atormentarte. San Juan rechaza los honores que le rinden los judíos llamándole Profeta y Mesías; se humilla delante de Jesucristo. Humíllate tú ante Dios y los hombres. Lo que haces, lo que sufres, nada es comparado con los trabajos y sufrimientos de los santos. ¿De qué sirve mortificar el cuerpo por la paciencia, si el espíritu está hinchado de orgullo? (San Jerónimo).

La humildad
Orad 
por la conversión
de los pecadores

ORACIÓN
     Oh Dios, que habéis solemnizado este día con el nacimiento de San Juan Bautista, conceded a vuestro pueblo la gracia de los gozos espirituales, y dirigid las almas de los fieles por el camino de la salvación eterna. Por J. C. N. S. Amén.

23/VI SANTA EDILTRUDIS, Virgen

23 de Junio

SANTA EDILTRUDISVirgen

  Si viviereis según la carne, moriréis;
 si, en cambio, con el espíritu hacéis
morir las obras de la carne, viviréis.

(Romanos, 8, 13).

   Santa Ediltrudis no vivía según la carne, puesto que guardó virginidad perpetua con el príncipe Tombrecto y el rey Ecfrido, que fueron sucesivamente sus maridos. Obtuvo de este último permiso para entrar en un monasterio. Por sus virtudes fue nombrada abadesa después de un año de profesión religiosa. Soportó con mucha paciencia un tumor que le sobrevino en el cuello. Oraba a Dios desde medianoche hasta la salida del sol. Dieciséis años después de su muerte, su cuerpo fue encontrado incorrupto. Acaeció su dichosa muerte el 23 de junio del año 679.

MEDITACIÓN
SOBRE LA MORTIFICACIÓN
   
I. Debes mortificarte si quieres vivir como hombre racional. Tu razón no será la soberana si concedes a tus sentidos todo lo que te piden. En todos tus actos ten puesta la mira no en lo que agrada, sino en lo que es razonable. No te dejes arrastrar al amor, al aborrecimiento, al placer; ello sería vivir a manera de animal. ¡Cuán pocos hombres hay que siguen las luces de la razón! Y tú, ¿lo haces? 
   
II. No basta vivir como hombre: para salvarse, hay que vivir como cristiano; es decir, que hay que obrar según el espíritu de Jesucristo, y no perseguir con nuestra conducta otro fin que el de agradar a Dios. Para esto, nada debe hacerse que contente la sensualidad y la ambición, nada que satisfaga las pasiones. Es preciso despojarse de las malas inclinaciones de la naturaleza corrompida, y hacer todo lo contrario de lo que ella exige: así es como hacen los verdaderos cristianos. Comienzan por aborrecer su vida pasada y por practicar lo que ellos aborrecían. (Tertuliano).
   
III. Si eres sacerdote o religioso, motivo de más para mortificarte, puesto que tu estado te separa del mundo y te consagra totalmente a Jesucristo; y esta mortificación debe extenderse al cuerpo y al espíritu, pues ambos están consagrados a Dios de manera especial. ¿Puedes decir en verdad: He muerto a todo el resto; las cosas de Jesucristo son las únicas que me encuentran vivo y pronto a obrar? (San Bernardo).

La mortificación
Orad 
por la Iglesia.

ORACIÓN
   Escuchadnos, oh Dios Salvador nuestro, y que la fiesta de la bienaventurada Ediltrudis, al regocijar nuestra alma, la enriquezca con los sentimientos de una tierna devoción. Por J. C. N. S. Amén.

22/VI SAN JUAN FISHER, Obispo y Mártir

22 de Junio

SAN JUAN FISHERObispo y Mártir

Juan Fisher - Wikipedia, la enciclopedia libre
Era libre respecto de todos
y de todos me hice siervo, para ganar más almas.

(1 Corintios, 9, 19).

   Juan Fisher, nacido en 1469, cursó sus estudios en Cambridge y llegó a ser canciller de esta universidad. En 1502, fue nombrado capellán de lady Margarita Beaufort, madre del rey. de Inglaterra, y en 1504 obispo de Rochester. En todos sus cargos distinguióse por su piedad y amor al estudio. Bajo Enrique VIII, se opuso a los deseos del rey que quería obtener la anulaci6n de su matrimonio y la dignidad de jefe supremo de la Iglesia en Inglaterra. Fue en carcelado en la Torre de Londres y, después, decapitado en 1535.

MEDITACIÓN
SOBRE EL AMOR AL PRÓJIMO
   
I. Bien está amar a los demás más que a sí mismo al punto de sacrificar la propia libertad para sacar a un desdichado de la esclavitud, tal como hizo San Paulino. Imita esta heroica virtud, amando al prójimo por lo menos como a ti mismo. Sírvele, complácele, habla en su favor; en una palabra, trátalo como quisieras que te trataran a ti, si estuvieras en su lugar. ¿Por ventura podría decirse de ti lo que se decía de los primeros cristianos: Ved cómo se aman, están dispuestos a morir unos por otros? (Tertuliano).
    
II. Te inclinas naturalmente a hablar favorablemente de ti mismo, a encontrar excelentes tus acciones, a disculpar tus defectos, a interpretar bien lo que te concierne. Haz lo mismo respecto de tu prójimo; trátalo con indulgencia. No quieres que se tengan ojos para tus faltas ni lengua para hablar de ellas. ¿Eres ciego y mudo tú cuando los otros hacen mal?
   
III. Tu amor por el prójimo debe ser universal, sin acepción de personas. Todos los hombres llevan la imagen de Dios, todos han sido redimidos por la sangre de Jesucristo, todos pueden ir al cielo; así, debes amarlos a todos, sin dejarte guiar jamás por tu humor y tu capricho. De otro modo, tu amor no es más que amor natural que no tiene derecho a re compensa alguna en el cielo. San Paulino se hizo esclavo para rescatar a un hombre que no conocía, pero en quien veía la imagen de Dios. Nuestro amor, decía él, no considera ni la persona ni la condición de los hombres, ve sólo las almas.

El amor al prójimo
Orad 
por el acrecentamiento de la caridad.

ORACIÓN
   Oh Dios, que todos los años nos proporcionáis nuevo motivo de alegría en la solemnidad de vuestro mártir y pontífice, el bienaventurado Juan, haced, por vuestra bondad, que honrando la nueva vida que ha recibido en el cielo, experimentemos aquí abajo los efectos de su protección. Por J. C. N. S. Amén

21/VI SAN LUIS GONZAGA, Confesor

21 de Junio

SAN LUIS GONZAGA, Confesor

  Os conjuro, hermanos, por la misericordia de Dios,
a que ofrezcáis vuestros cuerpos como hostia viva,
santa, agradable a Dios
.
(Romanos, 12, 1).

   San Luis Gonzaga, desde la edad de siete años recitaba todos los días, de rodillas, los siete salmos penitenciales y el Oficio de la Santísima Virgen; a los ocho años, hizo voto de castidad perpetua; a los trece, ayunaba tres días a la semana a pan y agua, y tres veces al día desgarraba su delicado cuerpo con la disciplina. Alrededor de los dieciocho años entró en la Compañía de Jesús y murió cinco años después, víctima de una enfermedad contraída por cuidar a los atacados de peste. Tan recogido era en sus oraciones, que todas sus distracciones en seis meses no sumaban la duración de un  Ave María.

MEDITACIÓN SOBRE LA VIDA
DE SAN LUIS GONZAGA

I. El joven santo fue víctima del amor de Dios; le sacrificó su fortuna, abandonando su marquesado para entrar en la Compañía de Jesús, a pesar de los obstáculos que oponía su padre a su piadoso designio. ¿Estás acaso, retenido en el mundo por lazos tan fuertes como los suyos? Dios bien merece que dejes todo lo que tienes, para seguir su llamado y ganar su paraíso; deja todo, si no materialmente, por lo menos por el espíritu y la voluntad.
   
II. Sacrificó Luis su cuerpo a Dios por el voto de virginidad, que renovó al entrar en religión. Émulo de la pureza de los Ángeles, llevó la molestia hasta no poner nunca sus ojos en una mujer. Además, mortificó su cuerpo con rigurosa y continua penitencia. ¿Quieres consagrar tu cuerpo a Jesucristo como hostia viva y santa? Custodia tus sentidos, mortifícalos. La vida de un cristiano debe ser continuo martirio.
  
III. Consagró el santo su libertad a Dios por el voto de obediencia. Los honores que ahora recibe, en el cielo y en la tierra, son el precio de su voluntario abatimiento. El camino más seguro para ir al cielo es el de la obediencia. Obedece a tus superiores fiel mente, prontamente, sin murmurar; a Jesucristo es a quien obedeces, Él es quien te recompensará. En fin, recuerda que no sólo los religiosos, sino también los cristianos deben ser víctimas que se inmolan sin cesar a Dios. Los cuerpos de los fieles son hostias de Dios, miembros de Cristo, templos del Espíritu Santo. (San Agustín).
  
La castidad
Orad 
por las órdenes religiosas

ORACIÓN
   Oh Dios, dispensador de los dones celestiales, que habéis unido en el angélico Luis, una admirable inocencia de vida con un gran espíritu de mortificación, haced, por sus méritos y oraciones, que, si no hemos imitado su pureza, por lo menos imitemos su penitencia. Por J. C. N. S. Amén.

20/VI SAN SILVERIO, Papa y Mártir

20 de Junio

SAN SILVERIOPapa y Mártir

  Para acercarse a Dios, es menester creer que existe,
y que es remunerador de los que le buscan.
(Hebreos, 11, 6).

   San Silverio, Papa, negó a la emperatriz Teodora restablecer al hereje Antimo en la sede de Constantinopla, y fue confinado en la isla Pontia. Se refiere que desde allí escribió en estos términos al obispo Amador: "Me alimento con el pan de la tribulación y el agua de la angustia, pero jamás he renunciado, y tampoco ahora renuncio a mi cargo". Murió hacia el año 537, a consecuencia de los malos tratos que se le infligieron.

MEDITACIÓN

SOBRE TRES ATRIBUTOS DE DIOS

I. Dios es todopoderoso; de nadie depende, y todas las creaturas dependen de Él; y, sin embargo, ¡Yo me atrevo a ofender a este Dios que puede entregarme a los suplicios eternos! Si Él está contra mí, ¿quién estaría a mi favor? ¿Dónde ocultarme si Él me persigue? Desde que pequé soy su enemigo, y no puedo vivir en paz y sin temor. ¡Ah! es que yo no medito es tas verdades como debería hacerlo. A menudo repetiré este acto de fe: Creo, Señor, que sois omnipotente, y que tendréis en cuenta toda acción tanto buena como mala, porque todo Juez es remunerador en  la causa sobre la cual pronuncia sentencia. (Tertuliano). 

II. Ese Dios será mi juez al fin de mi vida y al fin del mundo. Ese juez está presente en todas partes y a nadie teme; sabe todo lo que hago, nada puede substraer se a su conocimiento; es justísimo y la compasión no tendrá cabida en Él. Lo que hay de más tremendo es que este juez está irritado; y, a la vez, es juez y parte, porque a Él es a quien ofendí. ¿Qué será de mí, Señor, si Vos me tratáis según el rigor de vuestra justicia? Es horrible caer culpable en las manos del Dios vivo. (San Pablo).

III. Dios es eterno; sus decretos son inmutables: lo que Él ha resuelto ejecútase infaliblemente; la sentencia que pronunciará contra mí nunca será revocada. Sin embargo, ¡cuán insensatos somos!, ¡preferimos la amistad inconstante de los hombres a la amistad del mismo Dios! ¡Preferimos desobedecer a Dios antes que disgustar a los hombres; nos adherimos a bienes transitorios, y despreciamos los bienes eternos e inmutables!

El temor de Dios
Orad 
por la conversión
de los herejes.

ORACIÓN

   Pastor eterno, mirad benevolente a vuestro re baño, y guardad lo con protección constante por vuestro bienaventurado mártir y Sumo Pontífice Silverio, a quien constituisteis pastor de toda la Iglesia. Por J. N. S. Amén

INTRODUCCIÓN

Acerca de la Santa Misa